Miénteme.

Miénteme.
Díme que soy la única que calienta tu cama.
Que no hay otra que se enrede en tus ojos.
Que ninguna te robará los besos. Ni sonrojará tus mejillas de niño travieso...
Que nadie se acostará a tu espalda ni besará cada fragmento de tu delicada piel de angel...
Que no volverán a decirte "te quiero" si no son mis labios los que lo pronuncian...
Díme que no volverás a tocar un alma que no sea el mío, que jamás llorarás por alquien que no soy yo...Que siempre me tendrás en la mente...Díme que siempre pensarás en mí aunque pasen los años...
Sólo míenteme. Hazme felíz dibujandome castillos en el aire que hay en mi corazón desde que te fuiste...Hazme creer que soy la única... Que nunca te volverás a enamorar...Que no desearás a otra...Solo dímelo una vez más y podré vivir de ilusiones el resto de mi vida...Creeré que nuestro amor será eterno, aunque al doblar la esquina de tu casa, tu habitación se poble de camisones y sonrisas ajenas...
Vuelve a susurrarme obscenidades al oído mientras los demás nos rodean...Vuelve a ponerme nerviosa clavándome los ojos en el escote...Persígueme entre las paredes de los bares, como cuando estábamos conociéndonos...
Vuelve a hacerlo todo conmigo...solo una vez más, para poder retenerte en mi vida por última vez...

Lo he vuelto a hacer...sé que no debí ...
Pero ayer te conté los lunares de la espalda y he vuelto a perderme en tu piel para siempre...

Felicidad Nº 1

¿Sabes lo que es llorar de felicidad? LLorar porque te dijo algo, y ya sólo con eso eres felíz.
Que se te agrande de repente el corazón y te reviente de alegría por dentro.
Que la sangre te hierva, los ojos te lloren y los recuerdos te peinen la mente.
Llorar porque piensa en tí. Porque tiene un hueco para que te cobijes en él. La persona más importante de tu vida y te hizo hueco en él, aunque sea pequeño, es un pequeño mundo para tí.
Y recorres el pasillo de tu casa y ya no sabes cómo hacer para sacar toda esa alegría de tu cuerpo, que no sabe cómo contenerla...
Y vuelves a sonreir y a llorar al mismo tiempo. Y te preguntas por cuánto tiempo más serás felíz...
Pero ya no lo quieres pensar, vives el "ahora". Y en este momento eres felíz, y es lo que importa.
Es mi felicidad nº 1.

Desesperación nº1

Te espero,
sentada,
me muero.

Por nada,
me comen los celos.

Mi alma
tropieza en el suelo
y escupe
trocitos de hielo.

Desconfiada
contemplo el cielo,
que abandonada
me tiene del miedo.

Caigo,caigo y caigo...y esos no son tus brazos...
Tampoco esa es tu voz cuando me hablan...Pero no me detengo,sigo pensando que eres tu quién está conmigo. Cierro los ojos fuerte, no quiero saber a quien tengo delante.
Y en cada gota de sudor, imagino que me muero contigo...
Nada es lo que parece, si no estás tú, nada es lo que quiere mi mente...
Solo quiero abrigarme con la piel que envuelve a tu alma. Quiero invadir para siempre una parte de tu vida y calarme con tu aura cada mañana que sol se cuele por las rendijas de tu dormitorio.
Despertarte con caricias en la espalda y beberme para siempre tu esencia en las bandejas de plata que me ofrece tu cuerpo.
Quiero descubrirte cada día, mirándome a escondidas mientras duermo. Volver a contar los lunares de tu espalda y ponerle nombre a cada una de tus pestañas cuando me miras como un niño con miedo.
Quiero volver a acariciar tus manos y seguir con las puntas de mis dedos el recorrido que dibujan tus venas por el brazo.
No quiero nada, pero lo quiero todo...

Cada palabra es un dardo que pega de lleno en mi corazón, me lo resquebrajas de ilusiones para luego quitarlas un día sí y otro no.
Cada beso es un disparo en mi frente, pequeño baúl de recuerdos que me acosan cuando me acuesto.
Cada mirada es un universo diferente. Un mundo nuevo que me invento si te quieres subir a mi tren. Si te vienes conmigo, haré un camino distinto por donde nadie más pase: solos tu y yo y el resto de la gente que nos mira de lejos...
No habrá ni cielo ni infierno porque estando a tu lado no habrá otra cosa mejor que tú...Y si miro por la ventana, no hay nada más. Mi mundo se queda en blanco, en puntos suspensivos...Mi boca muda no aprendió a decir "adiós" desde que te fuiste...