¡No, no quiero!

La cultura árabe, al igual que muchas otras, obliga practicamente a la mujer a casarse cuando aún es una niña. hay niñas que desde que nacen están prometidas, y otras que son vendidas a un hombre que se casará con ellas, con solo 8 años. Tan terrible injusticia, no solo es legal, sino que está bendecida por la religión de los chiítas.
Pero la venta de las niñas para el matrimonio, no solo se practica en los países árabes, sino que también es llevado a cabo por países africanos y asiáticos. Pero en el caso del islam, llama la atención la protección legal de tan abominable práctica.
Pero la venta de una niña no solo es realizada para consumar matrimonios, sino que puede derivar en la prostitucíón infantíl.
La prostitución infantíl es permitida bajo "la vista gorda" de las autoridades, porque no les conviene que un extranjero que deja divisas en el país, sea detenido. Además no solo las niñas se prostituyen,sino que también lo hacen los niños. Las víctimas principales son los menores, puesto que la ley protege al proxeneta,paradojicamente. Estos niños y niñas acaban en la cárcel sin ninguna protección.

En la cultura judía, la mujer se toma en un gran círculo familiar con unos trece años aproximadamente. Con ello, la familia se aseguraba la pureza y virginidad de la futura esposa, al no dar oportunidad de que la niña crezca y experimente por su cuenta expreciencias sexuales.

Pero los matrimonios forzados no nos es algo ajeno, porque también suceden aquí. . Hace unos meses una niña mauritana en Cádiz sufrió una violación por haber sido obligada a casarse con un hombre que podría haber sido su padre en unas vacaciones hace años en su país. Pero para las autoridades mauritanas fue algo de lo más normal, porque era una verguenza que una niña de 14 años aún no estuviese casada y no hubiese sido violada por su marido, como mandan las tradiciones.
Se cuenta que antes de que el islam llegara a todos los territorios asiáticos, a mujer árabe gozaba de un elevado estatus en la vida social. Pero tras el paso del huracán del silam, todo cambió para la mujer y fue el último eslabón de la sociedad...

Debieran de gritar "No, no quiero", cuando se les pregunta en la celebración de las nupcias. Pero es demasiado complicado acabar con unas costumbres tan arraigadas y oponerse a ellas, sabiéndose presas de antemano de una justicia totalmente machista.

Acabo de recordar una escena que me monté en mi cabeza cuando leí un libro "La princesa árabe". Una chica estaba en su dormitorio y en el salón estaba su hermano con amigos. A la chica le entró sed y fue a la cocina, cruzando por el salón. Acto seguido fue violada por todos los amigos de su hermano. Cuando la llevaron a juicio, los violadores fueron exculpados y la chica fue declarada culpable, porque supuestamente provocó a los chicos con el camisón que llevaba(un camisón hasta los pies y blanco opaco). Fue encerrada para el resto de su vida en una celda a oscuras e insonorizada para que no se oyeran sus gritos.